Dos espacios emblemáticos como la Capilla Buffo y el Cine Teatro Municipal fueron recuperados con el propósito de devolverles el protagonismo y la presencia que supieron tener. Gran expectativa en la sociedad unquillense.
En la edición junio cronicabamos la reinauguración de la sala del Cine Teatro con la implementación de mejoras que apuntaban a mejorar la calidad de la imagen y sonido de las películas. De esa manera, se comenzaba un nuevo capítulo en la historia del emblemático espacio.
Sumado a esto, en julio se abrió nuevamente al público la Casa Museo Buffo, quien había estado cerrada por una serie de reparaciones que se realizaron. De esta manera, el pueblo de los artistas volvió a tener a dos sitios emblemáticos por los que se caracteriza en la región nuevamente a disposición de la gente y con una fuerte apuesta para lograr una mayor atracción.
Lo que se da son procesos con un aspecto en común: Dos espacios culturales muy relevantes de la ciudad que hasta 2005 en caso de Buffo y 2008 en caso del cine, estaban abandonados”, comentó Emiliano Cárdenas, responsable de la coordinación de espacios Culturales de la Municipalidad de Unquillo a La Unión. “En el caso de Buffo, prácticamente abandonado el espacio en la totalidad: Sin seguridad, sin ningún tipo de mantenimiento. En el caso del Cine, estaba cerrado, desmantelado y habitado solo por los recuerdos de la gente de lo que había sido desde 1928”, resaltó el funcionario.
Recobrando la mística
La Casa Museo Buffo, cuya construcción comenzó en 1941, está ubicada en la Reserva Los Quebrachitos. Es un lugar de ensueño en el cual descansan los restos de Guido Buffo, su esposa y su hija. El sitio es uno de los atractivos turísticos más fuerte de la localidad.
Desde 2005, el establecimiento fue cedido en comodato por la Provincia a la Municipalidad de Unquillo. Cárdenas relato que “se partió de un espacio abandonado, en muy malas condiciones y que había quedado fuera de la mirada responsable que hay que tener sobre un patrimonio”. De esa situación es que comenzó desde ese año “un proceso de puesta en funcionamiento y recuperación de la casa, armar un museo y recuperar la capilla. Por eso es fundamental ese comodato que permitió que esto comience a funcionar como un espacio cultural del municipio”, resaltó el funcionario.
Desde hace casi un año, el lugar fue cerrado al público para poder comenzar con un proceso de restauración. “Hubo un trabajo muy importante que hizo un equipo conformado por Javier Correas que es arquitecto y Marcela Mammana que es restauradora. Esto permitió que la capilla hoy esté en condiciones de conservación como hace muchos años no estaba”, destacó.
“Se recuperaron los frescos, se restauró el exterior de la capilla para que las lluvias no sigan afectando al fresco que está dentro”. Dicho proceso se desarrolló con una técnica muy particular que fue traída desde Italia e implementada por primera vez en América Latina. Se basó en la utilización de nano partículas de cal y que permite que el fresco no pierda su naturaleza.
En tal sentido, Cárdenas agregó que “lo importante no fue solamente su restauración, si no la apuesta que hicieron el municipio, la restauradora y amigos de este patrimonio que de alguna manera aportaron y generaron las condiciones para traer este material que venía de Italia”. En los días transcurridos desde su reapertura, “un montón de gente ha ido muy entusiasmada a reencontrarse con la experiencia de la restauración”, observó.
El cine del encuentro
En 2008 la Municipalidad de Unquillo decidió recuperar el Cine Teatro Rivadavia. “Esta sala había quedado fuera de uso a partir de todos los cambios tecnológicos y de hábito de consumo cultural que implicaron desde fines de los 80 que muchísimas salas cierren”, relató el coordinador.
Ese año se hizo un convenio con el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), que permitió que la sala comenzara a funcionar: “A partir de ese momento comienza una apuesta a la recuperación de ese espacio que se sostiene en el tiempo, implica mejoras edilicias, haber conseguido instalar un sistema de calefacción y climatización”, comentó.
Un importante papel tuvo la sociedad de Unquillo que comenzó a acudir nuevamente al cine, lo que evidenciaba la necesidad de un espacio de encuentro y motivó a que se continuaran el camino implementando mejoras. Hace dos años la sala entró en una licitación que se realizó a nivel nacional y mediante la cual se hicieron posibles las recientes incorporaciones. “La sala se equipó con la última tecnología de proyección que hay en el mundo respecto a los estándares internacionales”, expresó Cárdenas, quien además explicó que “incorporan esta tecnología con proyectores digitales de alta definición que permiten la proyección en 2D y 3D. Eso es lo que ha comenzado a funcionar con una gran repercusión y afluencia de público”.
Es así como hoy, a partir de la ampliación de la cartelera y la gran calidad que se ofrece al público, se produce el regreso de la gente. “Hoy se pueden ver películas comerciales en el cine de tu ciudad. Hay algo significativo porque una sala de cine que tiene un precio más económico que los multicines permite que mucha gente que no tiene el dinero ni pueda organizar una salida en otra ciudad pueda ir”, destacó.
El objetivo de estas iniciativas se ve cumplido al ver la satisfacción por el trabajo realizado. “Hay un muy buen promedio de asistencia que tiene que ver con cómo la gente sigue apropiándose de los espacios. Ahí es donde las políticas públicas muestran su sentido. Si los visitantes de la Capilla no hubieran transmitido su entusiasmo y haber difundido, tal vez tampoco hubiese sido posible seguir apostando”, manifestó Cárdenas.
Direcciones:
Casa Capilla Buffo: Cno. prov. Los Quebrachitos s/n. Cabana.
Cine Teatro Municipal: Av. San Martin 1505
El marco de Eric 